El TDAH es el trastorno por déficit de atención e hiperactividad que es una afección crónica afectando a millones de niños, a veces los acompaña hasta la edad adulta. El TDAH comprende una combinación de conductas persistentes que incluyen la dificultad para mantener la atención, comportamientos compulsivos e hiperactividad.
Es de observar que los niños con TDAH también pueden presentar problemas de baja autoestima, dificultad para relacionarse e interactuar con otras personas y bajo rendimiento escolar. Los síntomas disminuyen a medida que el niño va creciendo y madurando, en muchos casos y siempre que haya una atención adecuada que les permita mejorar esas conductas. Sin embargo, aunque algunas personas no logran superar por completo los síntomas de TDAH si pueden aprender estrategias que los ayude a ser exitosos en su vida.
El tratamiento
No existe un tratamiento específico, pero si hay tratamientos que pueden ayudar mucho con los síntomas. Este tratamiento por lo general, involucra medicamentos e intervenciones conductuales. El diagnóstico y su tratamiento a tiempo pueden marcar una gran diferencia en los resultados.
El manejo de la ansiedad en niños con TDAH
Cuando un niño presenta TDAH lo primero que se debe hacer es focalizar los síntomas propios del TDAH, que pueden ser falta de atención, impulsividad e hiperactividad, una vez hecho esto, se procede a la enseñanza de las estrategias propias. Para manejar la ansiedad en los niños que muestran déficit de atención, hay algunas estrategias o ejercicios que pueden ayudar a controlar la ansiedad. Veamos algunas de ellas:
El juego del gato perezoso
Consiste en poner en acción la imaginación. Por un momento se deben imaginar que son un gato muy pero muy perezoso y que desea realizar un estirón de todos sus músculos. Se deben estirar los brazos lo más que se pueda delante de ti, luego procede a levantarlos por encima de la cabeza, y con mucha fuerza llévalos hacia atrás. Notas el tirón tan fuerte que lo sientes en los hombros. Ahora dejamos caer los brazos a los lados para que descansen del esfuerzo realizado. Muy bien. ¿Ves que bien se siente un gatito cuando esta relajado? El gatito está muy a gusto y contento. Este ejercicio debe ser repetido cinco veces.
Jugar con un enorme chicle
Si tienes un chicle muy enorme y deseas comerlo, masticarlo, morderlo, pero no lo logras porque es muy grande. Vamos a intentar morderlo con todos los músculos del cuello y de tu mandíbula, apretándolo muy bien. Siente como el chicle se mete entre los dientes, mastícalo fuerte muy fuerte. Muy bien, lo estás logrando. Ahora relájate y el chicle ha desaparecido. Deja caer tu mandíbula. Siente como se afloja tu mandíbula y tu cuello también esta suelto y muy relajado. Este ejercicio se debe repetir tres veces con tres chicles distintos.
El juego del limón
Imaginas que tienes un limón en tu mano izquierda, tienes que exprimirlo para poder sacarle todo el jugo. Concéntrate en tu mano y brazo izquierdo, en cómo aprieta mientras tratas de sacarle todo el jugo al limón, ves cómo se tensan. Bien, ahora dejas caer el limón. Este ejercicio debe ser repetido tres veces por cada mano.
¿Qué te parecieron estos ejercicios? ¿Conoces algún otro ejercicio para el control de la ansiedad en niños con TDAH?
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Imagen de YuliiaKa vía Freepik.es bajo licencia creative commons.
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